El Joker (I)

Hace un tiempo se hizo una encuesta a numerosos fans de Bola de Dragón para averiguar cuál era su personaje favorito de la saga. Sorprendentemente el número 1 no fue Goku ni su hijo Gohan: el personaje que más gustaba a la gente era Vegeta. Un dato que no mucha gente se podría esperar ¿Por qué los fans prefierieron al antagonista antes que al protagonista absoluto de la historia?¿Tiene esto que ver con la empatía que puede experimentar el lado malvado intrínseco de cualquier persona con la abierta maldad del personaje?¿O también puede venir dado por la mayor complejidad psicológica de la que los autores dotan a los antagonistas? Muchos y diversos pueden ser los motivos que llevaron a los fans a votar a Vegeta, seguro que algunos de ellos con razones de peso. Sin embargo aquí me voy a centrar en el análisis de uno de los personajes más malvados que han surgido en el siglo XX, con sus inicios en el cómic para su posterior adaptación al cine o a los videojuegos. En cada uno de los apartados podremos observar cómo se ha desarrollado el personaje y por qué se ha convertido en un icono a la altura de su némesis Batman. Sólo voy a enumerar algunos ejemplos en cada uno de los apartados puesto que existen numerosas referencias e innumerables apariciones del Joker, especialmente en novelas gráficas y en películas.

Cómics
El Joker apareció por primera vez en el Nº 1 de Batman, a principios de 1940. El Hombre Murciélago ya había hecho su aparición en el cómic un año antes, concretamente en el Nº 27 (mayo de 1939) de Detective Comics, con la intención de repetir el éxito que consiguió la editora National Periodical Publications (posteriormente DC Comics) con Superman, un año antes. Mientras que el hombre de acero representaba la pureza, la verdad y las buenas intenciones, Batman surgió con una idea más siniestra, del superhéroe que se mueve por los deseos de venganza más que por establecer el bien.
Si el protagonista de la historia también tenía algo de mezquino, el antagonista debía ser los mismo pero multiplicado por mil. Mientras que la creación del Hombre Murciélago se debe al mítico Bob Kane, el concepto inicial del Joker pertenece a uno de sus habituales durante los primeros años: Jerry Robinson (que también creó a Robin). La estética del Joker fue tomada del actor Conrad Veidt en la película muda El Hombre que ríe (Paul Leni, 1928).Las primeras apariciones del Joker nos mostraban un villano en el más puro sentido de la palabra: poseedor de una superior inteligencia que pone al servicio de la maldad para realizar sus meticulosos planes, tanto de robos, secuestros o asesinatos. Quizá lo que le hacía más temible es que su locura no le permitía diferenciar los diferentes bandos: él no forma parte de un grupo para llevar a cabo sus planes, utiliza a los demás sin importarle que en algún momento tenga que asesinar a sus secuaces para conseguir lo que quiere. Está solo, pero a la vez esa soledad es lo que le hace tan temible, sobre todo porque no tiene puntos débiles. Su gran inteligencia le permite concebir unos intrincados planes que ni el mismo Batman puede llegar a imaginar para poder adelantarse a sus movimientos.
En 1988, el gran Alan Moore realizó una pequeña historia centrada especialmente en Batman y el Joker llamada Batman: The Killing Joke (La Broma Asesina en castellano). Escrita por Moore, dibujada por Brian Bolland y coloreada por John Higgins, el cómic nos habla de los supuestos orígenes del Joker desde el punto de vista del guionista. En ellos habla de un padre de familia fracasado como comediante que piensa en cometer un delito para saldar sus cuentas y conseguir una vida mejor para su mujer embarazada. Sin embargo la misma noche en la que va a dar el golpe con sus secuaces su mujer fallece en un accidente doméstico a lo que se uno que durante el robo en una planta química es perseguido por Batman y cae en un tanque con residuos tóxicos, que le desfigura el rostro y le vuelve completamente loco. Aparte de la historia en sí, el cómic es realmente esclarecedor en cuanto a la psicología del Joker, puesto que en principio aparece como un hombre responsable que quiere lo mejor para su familia pero que debe afrontar cómo su mundo cambia radicalmente en pocas horas, lo que innevitablemente le traumatiza y le convierte en lo que posteriormente es.

Esa primera parte introductoria de su vida convive con la "actual": ya convertido en un paradigma del crimen y de la maldad que debe luchar para sobrevivir no sólo contra Batman, si no contra sí mismo y sus propios temores. Su teoría es que no hay que tomarse las cosas tan en serio puesto que al fin y al cabo uno no puede controlar todos los factores de su propia vida, así que todo es una comedia y hay que reir hasta en los peores momentos. La historia también es interesante porque expone la locura que hay tanto en el Joker como en el propio Batman. Reflexiona sobre la relación de odio que existe entre los dos pese a ser unos perfectos desconocidos el uno para el otro: "¿Cómo pueden odiarse tanto dos personas sin conocerse? afirma Bruce Wayne en una viñeta.
El final, tras una lucha entre Batman y su antagonista, es una reflexión sobre la relación que los une, el odio mutuo pero también la necesidad de que exista su contrario y así poder tener argumentos para justificar sus acciones, tanto las de uno como las del otro. No pueden existir si no existe su contrario, no existiría el bien sin el mal, ni viceversa.

Hasta aquí la primera parte de la importancia del Joker como villano y su aparición en distintos medios. En la siguiente entrega continuaremos con su interpretación dentro de los videojuegos y del cine.

Comentarios

Anónimo ha dicho que…
muy bueno el analisis con Goku, aun q yo habría votado a Goku ;) y buenisimo el análisis a Joker, y la balanza dle bien y el mal
Irene
Unknown ha dicho que…
Muy buen artículo. En mi opinión, La broma asesina es una obra maestra.De la nueva edición me gustan especialmente esos flash-backs en blanco y negro y los añadidos en color que resaltan ciertos objetos. El joker de Bolland y Moore late bajo el maquillaje de Ledger.