¡Y dicen que ya no se hace cine original en Hollywood! Es verdad que en los últimos años la mayoría de producciones que nos llegan desde Estados Unidos, especialmente las de grandes presupuestos y las que tienen más repercusión en las taquillas de todo el mundo, son secuelas, remakes o reboots de éxitos anteriores. Y que un gran porcentaje de estas producciones son adaptaciones ya sea de cómics o novelas. Sin embargo, afortunadamente, no siempre es así.
Un ejemplo de ello es la película de la que os hablo hoy, Swiss Army Man. Dirigida por los que se autoproclaman Daniels (un tándem de directores formado por Daniel Kwan y Daniel Scheinert, que han destacado en sus trabajos en publicidad y videoclips), se presenta como una de las propuestas más extrañas que llegarán este año. Ya se presentó en el pasado Festival de Sundance, donde se alzó con el premio a Mejor Director, y donde no dejó indiferente a nadie.
Además de estas primeras reseñas, que destacan lo bizarro de su propuesta pese a lo puramente sentimental y humano de su mensaje, la película también cuenta con otro atractivo: su dúo protagonista. Formado por Paul Dano, garantía de calidad y Daniel Radcliffe, que poco a poco está demostrando que puede ser algo más que el eterno Harry Potter, aunque en esta ocasión su capacidad interpretativa está tremendamente limitada. Me entenderéis cuando veáis el tráiler:
Un ejemplo de ello es la película de la que os hablo hoy, Swiss Army Man. Dirigida por los que se autoproclaman Daniels (un tándem de directores formado por Daniel Kwan y Daniel Scheinert, que han destacado en sus trabajos en publicidad y videoclips), se presenta como una de las propuestas más extrañas que llegarán este año. Ya se presentó en el pasado Festival de Sundance, donde se alzó con el premio a Mejor Director, y donde no dejó indiferente a nadie.
Además de estas primeras reseñas, que destacan lo bizarro de su propuesta pese a lo puramente sentimental y humano de su mensaje, la película también cuenta con otro atractivo: su dúo protagonista. Formado por Paul Dano, garantía de calidad y Daniel Radcliffe, que poco a poco está demostrando que puede ser algo más que el eterno Harry Potter, aunque en esta ocasión su capacidad interpretativa está tremendamente limitada. Me entenderéis cuando veáis el tráiler:
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