El pasado día 26 de septiembre se cumplieron 50 años desde que Los Beatles publicaron esa obra maestra llamada Abbey Road, no sólo uno de los mejores discos de su catálogo sino de toda la historia de la música, simplemente. Se trata del último disco que grabaron juntos en el estudio, aunque no fue el último en publicarse ya que Let It Be salió al mercado en 1970 aunque parte de él fuese grabado antes.
Lo curioso de todo, aparte de recordar una obra imprescindible para cualquier amante de la música, es que se ha aprovechado este aniversario para lanzar el videoclip oficial de uno de los temas. Se trata del Here Comes the Sun, escrito por George Harrison (que junto con la maravillosa Something son las dos canciones que escribió para el álbum).
Ya se habían visto muchos vídeos de gente anónima que utilizaban el tema para añadir imágenes que dieran sentido a esta canción, pero este videoclip tiene un punto que va más allá. Tira de melancolía, de fotografías realizadas durante la grabación del disco y también de algunas tomadas, y desechadas, para realizar la famosa portada del álbum.
El uso del color en la imagen es especialmente significativo ya que alude a esos tonos amarillos que poco a poco van apareciendo cuando amanece, haciendo clara referencia a la letra de la canción. Unas imágenes que ayudan aún más a disfrutar de un tema atemporal. ¿Harán lo mismo con otras canciones del disco? Esperemos que si.
Lo curioso de todo, aparte de recordar una obra imprescindible para cualquier amante de la música, es que se ha aprovechado este aniversario para lanzar el videoclip oficial de uno de los temas. Se trata del Here Comes the Sun, escrito por George Harrison (que junto con la maravillosa Something son las dos canciones que escribió para el álbum).
Ya se habían visto muchos vídeos de gente anónima que utilizaban el tema para añadir imágenes que dieran sentido a esta canción, pero este videoclip tiene un punto que va más allá. Tira de melancolía, de fotografías realizadas durante la grabación del disco y también de algunas tomadas, y desechadas, para realizar la famosa portada del álbum.
El uso del color en la imagen es especialmente significativo ya que alude a esos tonos amarillos que poco a poco van apareciendo cuando amanece, haciendo clara referencia a la letra de la canción. Unas imágenes que ayudan aún más a disfrutar de un tema atemporal. ¿Harán lo mismo con otras canciones del disco? Esperemos que si.
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